Para Galder, “Durante los últimos veinte años, el número de multimillonarios se ha multiplicado por cinco. Desde pequeños nos dicen que estudiando y trabajando duro podemos ascender en la escala social y encontrar una posición cómoda. Toda nuestra sociedad valora el éxito individual como objetivo final, incluso cuando esto implica una competitividad demencial sin la más mínima empatía. Rich Flu es una fábula oscura para nuestros tiempos. Es una sátira social, a la vez que divertida y trágica, que nos presenta las tareas casi inconcebibles: separarnos de todas nuestras posesiones, cuentas bancarias y la renuncia a todos nuestros bienes mundanos para huir de la más extraña de las epidemias.”
Para los productores, “Rich Flu cuenta una historia de migración a la inversa. Un recorrido desde el mundo del poder, el lujo y lo superfluo hasta la miseria, la pobreza, el dolor y la injusticia. Este recorrido se inicia desde la opulencia y el poder de Europa. Nuestros personajes inician su viaje paseándose por las alfombras rojas de grandes premiers en Cannes, viajando con jets privados, pujando en subastas en las oficinas del Buckingham Palace en Londres; hasta que se ven obligados a cambiar el rumbo de sus vidas y llegando a un campo de refugiados, zarpando en una peligrosa balsa en medio del mar y cruzando los paisajes desiertos de Libia hasta llegar en un poblado bajo las palmeras de Camerún. Una de las grandes riquezas de esta producción es justamente la variedad y el gran contraste entre los paisajes por los que transitan los protagonistas de nuestra película que, en su gran mayoría, están recreados en España, donde se consiguieron recrear más de nueve países entre Cataluña, Bilbao Fuerteventura y Senegal, además de una pequeña unidad en Alaska.”